(Publicado el 9 de noviembre de 2020)
Llegó el ansiado lunes. Yo desperté, el domingo, con uno de esos sueños que todos y todas tenemos, levantarme y no tener ni una arruga en la cara, sí sí, como Biden. Cincuenta y nueve años y ni un pliegue, ni una patita de gallo, nada, mi frente lisa como cuando tenía dieciocho. No… no…, no me había sometido a ninguna cirugía, nada de nada, ni botox, ni ácido hialurónico, ni nada por el estilo… la naturaleza de uno que es así.
El sábado a mediodía había notado que algún “bicho” del campo, porque yo estaba en el campo, se había cebado conmigo, durante el día aquello no revestía ninguna gravedad, pero tras dormir un plácido sueño, la cara era un pan de los de hogaza de dos kilos. La enfermera cuando me vio entrar al hospital dejó caer un “¡qué lastimita Dios mío!”. A partir de ahí ya os podéis imaginar, inyecciones, pastillas y demás.
Pero a lo que iba, a mí me da que al Donal Trump también se le habrá hinchado la cara… qué reveses te da la vida, cuando tú cuentas con seguir en esa Casa Blanca y te dicen que se te ha acabado el alquiler, ufff, no quiero ni pensarlo. Dicen que ha pedido ayuda a STOP DESHAUCIOS, pero que estos no van a ir, mucho viaje, para una casa solo.
El rey se ha ido a Bolivia, porque tienen nuevo Presidente y se ha llevado a la mejor de las compañías que podía llevarse, a Pablo Iglesias. El Rey es un cachondo para estas cosas, sabe con quien se lo puede pasar bien en un viaje, con un universitario. A Pablo Iglesias le hubiera venido bien ser TUNO.
Entretanto el emérito cuestionado minuto a minuto. ¡Qué difícil es ser Rey y que no te pillen en el intento!
Empieza la semana y yo mirando el filete de salmón, no sé cómo hacerlo … está como yo, sin arrugas.
FELIZ LUNES
“La suerte es la combinación de tu esfuerzo, tus ganas y tu alegría” (Sergio Morales)
#cronicadiaria
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