Ayer fue un día de elecciones en la Comunidad Valenciana, sí, no me miren así. Los meteorólogos habían dicho que quizás tendríamos lluvias y tuvimos que elegir la ropa que ponernos, porque las "encuestas" decían que el tiempo iba a ser maravilloso. Y así fue, tuvimos un día soleado, así que los que escogimos un traje que se llevara bien con el sol, triunfamos.
Lo mismo pasó en Madrid, que también tuvieron elecciones, ellos no de vestuario, sino de de políticos. Hace unas semanas que la señora Ayuso se vistió de "Agustina de Aragón" y ha ido ganando sus batallas. Allí también se cumplieron las encuestas y el PP arrasó.
En Génova se echaba de menos una jornada de triunfo como la de ayer. Los políticos sucumbieron ante el resultado que dieron los madrileños a "Ayuso".
Curiosamente sólo uno de los políticos de izquierda tuvo un mensaje en el que reconoció haber llamado a la candidata ganadora, para felicitarla, la representante de Más Madrid, Mónica García.
Gabilondo entonó el "mea culpa", sosegado, entregado al resultado y, quizá, consciente de que lo habían puesto a los pies de los caballos, desde que le dijeron que tenía que pronunciar aquella frase: "Pablo nos quedan doce días para ganar las elecciones". La vida le ha devuelto, en forma de eco, otra frase: "Te queda menos que a un caramelo en la puerta de un colegio".
Cuando los números del recuento ya eran demoledores, los madrileños aplaudían y aplaudían y aumentaba el recuento, el 70%, y aplaudían y seguía el recuento, el 80% y el PP superaba los sesenta diputados en la Asamblea y aquello era imparable y con el 99% ya eran sesenta y cinco los diputados conseguidos y los madrileños seguían aplaudiendo y entonces... entonces el "director de orquesta", Pablo Iglesias, pensó en "dar un bis" y salió y regaló a los "espectadores" una nueva pieza, "No soy útil, no voy a ser un tapón". Esta obra fue un destello de frescura, el público expectante, escuchó con atención cada una de sus notas y al finalizar el aplauso superó a los anteriores. Algunos "críticos musicales" indicaron que quizá le faltó "fanfarria" al final de tan maravillosa composición.
Madrid, ayer, estaba llena de "fascistas" y de "tabernarios" y de gente de "ultra derecha", según habían descrito ese conjunto de partidos de extrema izquierda, capitaneados por Iván Redondo y Tezanos. Pero lo cierto era que los habitantes de una Comunidad tan importante en España, ya eran conscientes del "engaño" de la izquierda, de su tendencia a provocar el odio hacia el vecino, cuando en España hace muchas décadas que sabemos convivir y había hablado en las urnas, han pedido una vida de convivencia, una vida llena oportunidades, una vida "a la madrileña".
Mientras disfrutamos de estos resultados, una familia y un entorno vive un drama tremendo, un padre se ha llevado a sus hijas y ha desaparecido, esto dura una semana y no sabemos todavía qué ha sucedido. La Benemérita, la Policía y otros muchos medios, andan detrás de muchas pistas para ver si recuperan a esas dos niñas para su madre. No me cabe en la cabeza lo que pueden estar pasando. Los hijos se adoran, por los hijos se daría hasta la vida, tenerlos es un privilegio, lo digo por experiencia y no me cabe duda que también es su experiencia querido lector.
La cara y la cruz de la vida, que se nos muestra como una "moneda" que difícilmente se sostiene de canto.
Disfruten del día, disfruten de su vida, sobre todo... amen, porque "el amor es un "tinte" que da un precioso color a cualquier momento" (Sergio Morales)
#cronicadiaria
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